Los y las estudiantes de Gijón tienen mucho que decir en el proyecto de ciudad inteligente y sostenible al que se enfrentará el municipio durante los próximos años. Ellos serán parte activa en este cambio, pudiendo contribuir a su desarrollo con las aportaciones que vayan haciendo. En este sentido, LUCE Gijón Laboratorio Urbano promueve un modelo de ciudad inteligente basándose en la participación ciudadana, que les ha llevado también hasta distintos centros educativos del concejo.
El pasado jueves 25 de enero tuvo lugar en el I.E.S. Universidad Laboral el primero de los tres Hackathon previstos bajo el título ‘Social Hackers – Diseñando el futuro de la ciudad’. En este evento una treintena de alumnos y alumnas del centro plantearon propuestas, que además de innovadoras fueron de lo más creativas.
El reto sugerido era poner en marcha una idea viable y que resultara de utilidad para la ciudad. Para ello debían describir el objetivo del proyecto y aclarar cómo repercutiría en el beneficio de Gijón. Esto exigía concretar los recursos necesarios para llevar a cabo esta iniciativa, así como el público que se beneficiaría con dicha medida.
Estos estudiantes, divididos en cinco grupos, expusieron sus contribuciones a ese modelo de ciudad sostenible, destacando sobre todo la originalidad en sus propuestas. El primero de ellos planteó una aplicación con las rutas más fluidas para circular por las calles de la ciudad, con un sistema de puntos para canjear en las gasolineras.
También enfocado hacia la movilidad y a los desafíos de la conducción, otros participantes propusieron un sistema de avisos a través de las señales para los vehículos que rebasaran la velocidad permitida. Una solución perfecta para concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de respetar los límites al volante.
Otros asuntos que se expusieron fue la fabricación de combustible a partir de huesos de aceituna para los trenes, un sistema de regadío sostenible que permitiera la reutilización del agua de lluvia y la creación de robots para desempeñar ciertas tareas bajo el control de las personas.
Los y las escolares que tomaron parte en esta iniciativa volvieron a demostrar una vez más su creatividad para proyectar ideas innovadoras. Ellos son el futuro y los que protagonizarán los cambios que requerirán las ciudades.